
B.Echeverría
21st Century es el single elegido por Denis Granan para lanzar su proyecto en solitario de la mano de Fluctua Records, su propio sello. Hablamos con él sobre su vuelta a las música tras un parón de varios años.
Siempre has estado vinculado a la música, durante mucho tiempo te hemos visto, por ejemplo, sobre los escenarios con Rumia pero el 18 de noviembre nos sorprendes a todos con el single 21st Century con el que lanzas tu proyecto en solitario.
Sí, digamos que los que queremos hacer música o ser artistas en general, siempre acabamos volviendo. En mi caso necesité un parón en 2017 y tener una vida más convencional, más tranquila, perdí a mi madre a razón de un cáncer en ese mismo año. Ya no había nadie que me fuera a sacar las castañas del fuego.
Rumia fue una oportunidad de poder empezar otra vez a un ritmo más lento, ya que allí no soy el protagonista, y con menos peso sobre mi, fue la primera vez que toqué para alguien, siempre solía ser el cantante y me ayudó bastante, en esa época (2019) empecé a aprender tocar la batería, mejorar la guitarra, piano y durante la pandemia incluso canto, con clases en remoto. Como dice una buena profe mía, la música siempre espera. Mientras tanto he vivido, he sufrido y con suerte, tendré alguna cosa interesante que decir.
21 st Century habla sobre la complejidad de del proceso creativo en la música ¿cómo ha sido el proceso de escritura y preparación del single?
Escribir requiere rutina, y yo no la tenía. Si a eso le sumas que uno se hace mayor y trabaja en otros campos, en los que bueno, lo hacía bastante bien, pues tiendes a esperar unos resultados inmediatos en la composición que no son reales, a juzgar todo lo que sale y a no estar motivado por nada ya que no tiene el nivel, hay que darse tiempo.
Para mí, el proceso fue algo duro, de plantearme si de verdad quiero componer, pero Blanca Pereira (Rumia) me ayudó mucho en el proceso, para empezar emocionalmente (uno se vuelve un poco inaguantable cuando la creatividad no fluye) y finalmente abriéndome a co-escribir. Al principio tenía mis miedos al respecto, pensaba que para que algo fuera auténtico tenía que hacerlo yo al 100%, pero conforme fui escribiendo más cosas se me fue yendo de la cabeza, prefiero escribir más música y que esta sea compartida a escribir una sola canción yo sólo.

Vives a caballo entre Madrid y Berlín, ¿cual ha sido el sitio elegido para la grabación
Sí, aunque las canciones nacieron en ambos sitios (las demos) la grabación fue integra en Madrid, en estudios Sonobox con Manuel Colmenero como productor. Quería trabajar con él, nos conocemos desde hace años por Rumia y además de admirarlo mucho por todo lo que sabe, el proceso con él era lo que buscaba, una mezcla entre un juego y un reto.
¿Se vive y se valora de forma distinta la dedicación artística, en tu caso musical, en Berlín?
Bueno, esta es una pregunta que varía en función de la época, mis padres son/fueron artistas, aunque cada uno a su manera, sé por ellos lo que es ser artista en España durante la posguerra y democracia.
A mi modo de ver, el que el fascismo haya perdurado más que en cualquier otro país de Europa durante el siglo XX hace que el arte siempre se haya visto relegado a la verbena y a la juerga, porque es el único área que se le dejaba durante el franquismo. Es algo que mi generación y la siguiente ya no comparte obviamente, pero que hace que estemos en desventaja en cuanto a industria musical, oferta, audiencia, etc
Berlín tiene mucha oferta cultural que ofrecer, no tienes más que mirar los circuitos de gira de artistas anglosajones, muchas veces se saltan España o sur de Europa (a excepción de festis) pero luego siempre pasan por Alemania. Y luego también mucha oferta underground y pequeña, lo cual está genial para quien está empezando. Micros abiertos, ciclos de conciertos…
Creo que la razón, es una mezcla entre la historia y también el idioma. Es fácil llegar cantando en inglés a una audiencia Alemana, ya que dominan mucho el idioma, en nuestro caso, en España, yo creo que las bandas que cantan en inglés y “triunfan” no es que sea porque la gente haya entendido sus letras o su mensaje, sino porque conectan con la parte más musical.
Has hablado en alguna ocasión que tras tu alejamiento de la música durante 5 años, vuelves a ella comenzando otro capítulo, tomándotela de otra forma.
Sí, digamos que la fase de la idea romántica de la música ya se me pasó. Esa de que de repente alguien te va a descubrir y todo explota.
Todo lleva mucho tiempo, más del que parece, si uno no aprende a disfrutar haciendo las cosas y el camino, no tiene sentido hacer nada.
Sin embargo, durante ese parón, has seguido ligado a la cultura y has creado tu propio sello Fluctua Records.
Sí, nace como necesidad para articular la música de Rumia y la mía pero también para invertir en otros artistas y crecer juntos creando oportunidades que de otra forma sería imposible llegar.
Ahora mismo somos 5 artistas y en 2023 iremos compartiendo cosillas de cada uno.
La presentación de tu single la haces con una imagen muy potente, un videoclip grabado nada más y nada menos que en el emblemático cine Capitol en Madrid.
La verdad tengo mucha suerte de trabajar con mucha gente que se lo curra mucho, que no se ven de forma directa, pero que de forma articulada en las sombras hacen cosas tan bonitas como mi video de 21st Century, muy agradecido a todos los que lo hicieron posible!